Tarjeta regalo de Ikea

La tarjeta regalo de Ikea me parece el detalle perfecto para una fiesta de bienvenida en una casa, para cualquier persona que se acabe de mudar, o, simplemente para dar a aquellos a los que les gustan los temas decorativos.  ¡Y es que se trata de un regalo siempre aprovechable (a diferencia de una figurita, una funda nórdica que no va con las cortinas o una sartén cuando resulta que lo que falta en esa casa es un cazo)!

Lo mejor de la tarjeta regalo es que la puedes cargar con el importe deseado, no hay ni mínimo ni máximo, así que darás justo lo que quieres dar. Y dirás tú, también puedo regalar dinero directamente… pero reconocerás que tender un billete en medio de un cumpleaños no queda muy elegante (y además parece que lo que no querías era discurrir) 😛

¿Quieres saber cómo funciona la tarjeta regalo de Ikea?

Pues como todas las tarjetas regalo. Se carga con un importe y la persona que lo recibe puede gastarlo cuando quiera (a menos que haya fecha de caducidad, en ese caso aparecerá en el dorso) y como quiera, tanto todo junto como un poco un día y otro poco el siguiente.

La tarjeta regalo no es nominativa, así que ten en cuenta que si la pierdes Ikea no te la va a reponer. La puedes usar en cualquier producto Ikea salvo en el restaurante y en la tienda de alimentación.

Muchas veces la propia Ikea hace promociones en las que te devuelve un tanto por ciento de la compra en tarjeta regalo, pero ten en cuenta que esas suelen tener fecha de caducidad (suelen durar unos 6 meses). Y si tienes una en casa y no sabes cuánto saldo le queda, puedes llamar a 902 400 922 o acercarte a una tienda y preguntar en atención al cliente.

De lo que no cabe duda es de que, para fans de Ikea como nosotros, una tarjeta regalo puede ser el mejor regalo.