Cocinas blancas de Ikea

Las cocinas blancas son una de las especialidades de Ikea. De hecho, si te fijasen cualquiera de sus catálogos de cocinas, los muebles en color blanco ganan por goleada.

Esto es así por diversas razones. Primero, porque la cocina es un espacio que se quiere limpio, aséptico y claro, y los muebles blancos ayudan a crear esta sensación.  Segundo porque Ikea siempre piensa en los espacios reducidos, y si tu cocina es pequeña, la mejor manera de engrandecerla visualmente es utilizar el blanco (y mejor con brillo). Tercero porque el estilo escandinavo, tan de moda y tan típico de Ikea, apuesta por este color en todas las estancias de la casa.

Y yo encantada, porque las cocinas blancas de Ikea me parecen siempre una buena opción. ¿Vemos algunos ejemplos?

Una de las ventajas de elegir cocinas blancas es que resultan muy fácil de decorar: ¡combinan con cualquier color! Así, podemos escoger cualquier tono para las paredes, los suelos o los accesorios, que los muebles blancos nunca desentonan.

Para un look minimalista, eso sí, podemos optar por darle todo el protagonismo al blanco, como vemos en la cocina de portada, donde el blanco solo se compensa con toquecitos de gris. Se trata de una cocina muy luminosa y que transmite sensación de pureza y elegancia, aunque en mi opinión le falta un poco de calor de hogar.

Algo que se puede solucionar combinando las cocinas blancas con encimeras, suelos o accesorios de madera. En la foto de abajo algunos de los muebles son blancos y otros color madera, una mezcla muy habitual como ya dijimos en estancias modernas, ya sean de estilo nórdico o simplemente natural.

Aunque si me tengo que quedar con una de estas cocinas blancas, yo elijo la siguiente, en riguroso blanco pero con incursiones en el negro y en el rojo para cierta inspiración pop muy actual. Me gusta la elección de azulejos oscuros para el salpicadero, ¡me lo apunto!

Si eres más de cocinas retro y vintage, las puertas Stat hueso, en color blanco y con rayitas, son las mejores para recuperar este estilo. Se completa el look con la encimera de madera y delicados textiles de estampado floral.

En las cocinas pequeñas, el blanco es casi obligatorio. Muebles, paredes, ventanas y hasta alfombra son fieles a esta premisa. Si a eso le sumamos unas plantitas, queda un ambiente super fresco.

Como ves, las cocinas blancas se adaptan a muchos estilos y necesidades. ¿Eres fan o prefieres espacios con más color?