Elige tu pizarra IKEA: infantil y con caballete o de pared e imantada

¡Una pizarra IKEA hará un gran servicio en casa! A los peques les encanta tener una en la habitación y poder pintar (o jugar a ser profes, una vez que tienen un encerado como el del cole). ¡Pero no solo sirve para los niños! En la cocina o en el recibidor no está nunca de más tener una pequeña pizarra donde apuntar la lista de la compra o la gente que ha llamado.

Y además, desde un punto de vista decorativo, las pizarras desprenden cierto toque creativo e informal, y por lo tanto, mucho encanto. Aunque la pizarra más conocida de la multinacional sueca es sin duda la de la serie Mala (un regalo de Navidad muy socorrido) no es la única opción.

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Comenzamos con la famosa pizarra Mala, para niños. Se trata de un caballete polivalente, ya que cuenta con una pizarra blanca por un lado, y una clásica negra por el otro. Además, tiene el tamaño ideal para los peques (40x60x60 cm) y se puede plegar cuando no se usa, para guardarla más cómodamente. La estructura está realizada en madera de pino y cuesta 19’99 euros.

Como decíamos, es posiblemente uno de los regalos más pedidos por los niños cuando van a IKEA con sus padres…¡y es que tener pizarra en la habitación mola mucho!

Eso sí, recuerda que en la pizarra blanca no se pueden usar tizas, sino que necesita unos rotuladores específicos (que también puedes encontrar en la serie Mala; 4 unidades de cuatro colores diferentes cuestan 4 euros).

¡Pero ya dijimos que la pizarra IKEA no tiene que ser solo para los peques! En la serie Luns hay un artículo que me chifla porque está muy bien pensado: se trata de una pizarra de pared, pero muy completa. Así, cuenta con una superficie de pizarra donde puedes escribir con tiza, pero además, como está imantada, también puedes usar imanes para dejar a la vista algún papel importante. Y por si eso fuera poco, cuenta con dos pequeños compartimentos para guardar cosas, y hasta dos ganchos de los que puedes colgar unas llaves, un fular o cualquier otro objeto.

¡Así, resulta el complemento perfecto para poner sobre un mueble recibidor! En la entrada, nos servirá para anotar todo lo que tenemos que hacer, dejar colgadas las llaves, guardar el correo, apoyar el móvil, etc. Aunque también es buena idea para la cocina (hay quien usa los pequeños compartimentos para colocar las especias), o el despacho. Su precio es de 19’99 euros.

Otra pizarra de pared IKEA interesante es la Malarna, que es además calendario (incluye un recuadro por cada día de la semana para anotar las tareas pendientes). Además, en la parte interior incluye unos pequeños pomos de los que se pueden colgar las llaves o accesorios de papelería como las tijeras. ¡Muy recomendable para la oficina! Se trata de una novedad del calendario IKEA 2019 que intuimos que va a triunfar.

Por último, conviene tener en cuenta que en la colección Uddevalla, hay puertas y paneles con superficie pizarra para incluir este práctico material en cualquier rincón. ¡Un paso intermedio para los que no se atreven a pintar las paredes con pintura pizarra, pero quieren darle un toque creativo y artístico a la estancia! Las puertas cuestan entre 30 y 40 euros la unidad (dependiendo del tamaño) y son para los muebles de cocina. Puertas negras y mate, que puedes usar como pizarra para escribir recetas, la lista de la compra, o las actividades de los peques. Además, la superficie de laminado es resistente a los golpes y fácil de limpiar, y resulta ideal para dar un aire nuevo a esta parte de la casa.

En cuanto al panel, es de 62 x 240 cm, y lo puedes usar tanto sobre la pared como sobre algún mueble. Su precio es de 80 euros.

¿A qué esperas para comprar tu pizarra IKEA?